Los gobiernos autocráticos ya no están dirigidos por tiranos
rodeados de colaboradores firmes y voraces, sino por
sofisticadas redes de estructuras financieras cleptocráticas,
servicios de seguridad y propagandistas profesionales
conectadas entre países. Lo que realmente une a los miembros
de este club es el deseo común de preservar y aumentar su poder
y riqueza. Ningún país lo lidera, se ve más bien como una
aglomeración de empresas cuyos vínculos se cimentan en
acuerdos diseñados para paliar los boicots económicos
occidentales o para amasar fortunas personales.
Autocracia S.A.
contextualiza el nuevo mundo de los dictadores y desgrana
cómo han moldeado la economía y la política de las
democracias. ¿Es posible derrotarlos?