La irreverencia, la ironía, la crítica a cualquier forma de opresión caracterizan estos textosde Hrabal en los cuales por primera vez aparece el legendario tío Pepin.
El protagonista principal de este libro es el tío Pepin, personaje presente en buena parte de la obra literaria de Bohumil Hrabal y que el mismo autor definió como su musa inspiradora. A través de un lenguaje único, el tío Pepin nos cuenta en estas páginas las desventuras de las clases bajas y la de enfrentarse (o no) a ellas con ese espíritu irreverente e irónico que caracteriza al pueblo checo y que tan bien retrató Jaroslav Hasek en "Las aventuras del buen soldado Svejk". La palabrería del tío Pepin nos transporta a un mundo subterráneo y marginal, el mismo entorno donde por primera vez se publicaron estos textos en forma de "Samizdat", las ediciones ilegales que circulaban en Europa Oriental durante la Guerra Fría.