En el recinto de la Feria se erige suntuoso uno de los mejores retratos de la sociedad inglesa de principios del siglo XIX, cuyo director de escena de mirada desencantada no es otro que William M. Thackeray, maestro en el arte de crear personajes femeninos. Así, pronto veremos pisar el escenario a dos mujeres inolvidables: la dulce y apocada Amelia Sedley y la inteligente y ambiciosa Becky Sharp cobran vida en un juego fascinante, lleno de trampas y de emoción, en una obra magistral de la literatura de todos los tiempos: La feria de las vanidades.
La clásica traducción que en su día realizara Alfonso Nadal viene precedida en la presente edición por un esclarecedor estudio introductorio. Lo firma John Carey, catedrático emérito de literatura inglesa en la Universidad de Oxford y crítico literario de renombre indiscutible.