«A Picasso le encantaba divertirse y a los niños nos dejaba jugar con las cosas, pero se enfadaba mucho con los adultos como le tocaran algo», recuerda el autor.
Este libro cuenta una historia real. La de Antony Penrose, hijo de la fotógrafa Lee Miller y del pintor y escritor Roland Penrose. Antony nos cuenta en este libro sus recuerdos de infancia con un compañero de juegos muy especial, un artista famoso en todo el mundo que un día fue desde Francia a visitarlos. Se llamaba: Pablo Picasso.