Definir lo que hace Miguel Noguera es tan imposible como inútil. Le ofrecemos unos consejos para saber por dónde coger este libro (en un sentido metafísico):
Acepte lo que le viene con la valentía y la estupidez de un lector trágico. Si sospecha que se están quedando con usted, disfrútelo. Siempre es bueno que alguien se acerque a jugar. Prepárese para pasar por todos los estados de ánimo y pensamiento, para sufrir, compadecer, identificarse y hacer catarsis. Entre sin miedo en este mundo roto de humor fino y chistes malos, de psicoanálisis extremo y costumbrismo desarraigado, de interrogación moral sin moraleja, de poesía primitiva y análisis lingüístico. Este mundo lleno de ideas que no se le habían ocurrido a nadie en más de tres mil años. Sepa que se va a reír tanto que le dolerá la barriga, pero será una risa nueva. Y un dolor que hacía tiempo no sentía. Por último, abandone toda esperanza de poder explicar lo que ha leído y, sobre todo, de poderlo olvidar.