Saben lo que compras, lo que buscas, lo que no te gusta; tienen todos tus datos; te siguen, te vigilan, te conocen. En un mundo transformado en dígitos, te han convertido en un número más de una infame estadística. Te refugias en el consuelo de que siempre existirá algo que escape a su control. En este contexto, Belén Gopegui da voz a cuatro protagonistas: León y Minerva trabajan para empresas tecnológicas enfrentadas que se dedican a averiguar qué rincones de la vida íntima todavía permanecen fuera de la cultura de la vigilancia. Para ello analizarán de cerca a Jonás y Casilda, justo en el momento en que empiezan una historia juntos. Lo que no se imaginan es que alguien muy poderoso ha empezado a vigilar a los vigilantes.