La vida de Hannah cambió por completo cuando su madre se volvió a casar y cumplió su sueño de abrir la pastelería Azúcar y Canela. Ahora vive en una ciudad diferente, va a otro colegio, tiene dos hermanas pequeñas y un grupo de nuevas amigas. ¡Todo un reto!
Hannah está feliz con sus nuevas amigas, especialmente con Mia, con quien comparte su pasión por la repostería. Pero la timidez de esta y su necesidad de complacer a las demás, le van a jugar malas pasadas. Por otro lado, Hannah ayudará a George a tomar una importante decisión.